Abogacía

Dos teorías o versiones hemos escuchado acerca la creación de nuestro mundo; una teocrática o teológica y otra científica.

La científica conocida como Big Bang, parte de la gran explosión cósmica del universo que creó los diferentes planetas bajo la singularidad espacio-temporal.

Y la teocrática, según la cual Dios creó la Tierra en 7 días en la tradición judeo-cristiana.

Fundado en esta  última y creando una alegoría de las tres profesiones más antiguas puede afirmarse que tres males agobian a la humanidad; la ignorancia, las enfermedades y la injusticia.

Al saber esto, Dios creó al maestro para acabar con la ignorancia, al médico para procurar la salud y al abogado para combatir la injusticia.

Esta alegoría sirve para confirmar la misión propia del abogado, luchar por la justicia, porque en los múltiples eventos y situaciones sociales, prive la justicia.

Por ello todo abogado debe recordar y actuar conforme a los siguientes tres principios:

Vivir honestamente

No hacer el mal a nadie y

Dar a cada quien lo suyo

Pues el abogado realiza en la sociedad múltiples actividades propias de su profesión, así se desempeña como litigante, como agente del ministerio público, como asesor jurídico, como asesor jurídico, como juzgador y como maestro, entre otras actividades, entre las que destaca también la política.

Para realizar bien sus funciones, el abogado debe ser un jurisconsulto o jurisprudente que significa sabiduría del derecho, lo cual se adquiere por medio del permanente estudio y la experiencia en el ejercicio de la profesión, por ello Eduardo J. Conjeture, en uno de sus célebres mandamiento señala: Estudia: el derecho se transforma constantemente, si no sigues sus pasos serás cada día un poco menos abogado “mandamiento que hoy más que nunca debe observarse “ante el proceso de globalización y las transformaciones jurídicas que provoca en todos los espacios de la sociedad.

Las transcendentes reformas constitucionales y legales en  las áreas de las telecomunicaciones, el medio ambiente, la economía, los recursos naturales, la educación, la política, los derechos humanos, entre otras tantas, así como los nuevos criterios jurisprudenciales de la Suprema Corte de Justicia de la Nación sobre el control de constitucionalidad y de convencionalidad, y que decir de la necesidad de conocer el derecho internacional y sus instituciones como la Comisión Interamericana de Derechos Humanos y la Corte Interamericana de Derechos Humanos, aquí en América.

Hoy la tarea del abogado es enorme, por ello que quienes piensen que estudiar derecho es fácil y ser abogado es sencillo, está absolutamente equivocado.

El auténtico, el verdadero abogado tiene grandes responsabilidades ante la sociedad en el campo de su ejercicio profesional.

De aquí también la responsabilidad de los docentes en su tarea de orientadores y facilitadores en la búsqueda y construcción del conocimiento jurídico y de las facultades de Derecho, que como la nuestra de la Universidad Veracruzana, cumple cabalmente su tarea de preparar a los nuevos profesionales en derecho y de la que han egresado excelentes juristas como Aureliano Hernández Palacios, Víctor Manuel Hernández Flores, Abel Escobar Ladrón de Guevara, Mercedes Gayosso y Navarrete, Guillermo Ortiz Mayagoitia, Fernando López Arias, entre otros tantos que con su trabajo como docentes, juzgadores, litigantes o políticos han iluminado los espacios del derecho. Y a propósito debemos destacar aquí y ahora como decían los escolásticos que en la fundación de la Universidad Veracruzana, la Facultad de Derecho estuvo presente, fue una  de las entidades académicas que conformó nuestra Alma Mater y que ha sido una facultad que se ha dado buen prestigio , sin querer soslayar los lamentables episodios que hemos vivido.

Por ello, la enseñanza jurídica aparece en el recuadro derecho como lex, del original y autentico escudo de la Universidad Veracruzana y también hoy en el mismo jubilo que celebramos el día del abogado, rendimos tributo a la Facultad de Derecho y a la Universidad Veracruzana en sus 70 años de cumplir con la importante y trascendental misión de formar excelentes profesionistas para servir a Veracruz y a México.