Ya existe una orden de aprehensión en contra de Vicente Benítez, quien, junto con Juan Manuel del Castillo fueron dos de los hombres más cercanos al exgobernador Javier Duarte de Ochoa y de los principales beneficiados con la estela de corrupción que aquel gobierno dejó a su paso.
Un tercer hombre fue Tarek Abdalá, un rufián ambiciosos como pocos, una rata de primera vaya, quien también le fue desleal a su amigo Javier Duarte.
Entre los tres manejaron la pachocha a su antojo hasta lograron hacerse millonarios de la noche a la mañana.
Muchos son los que se preguntan porque no les confiscan propiedades y dinero a los tres amigos, de lo recuperado podrían ayudar al pueblo tan afectado estos días por la pandemia del coronavirus, eso claro, si nuestras autoridades quisieran actuar al respecto.