Al que le sigue valiendo un pepino los problemas de Xalapa por la falta de empleos es a Hipólito Rodríguez, quien ahora ordenó actuar en contra de las mujeres comerciantes del centro de la ciudad.
No conforme con el desastre que hay por su falta de planeación en la realización de obras, en no atender los baches y hoyancos de las calles y avenidas y su pésima administración del presupuesto que lo ha obligado a devolver millones y millones al gobierno federal, ahora el gris alcalde arremete contra mujeres solteras dedicadas al comercio.
Las víctimas de Hipólito ahora son al menos 50 mujeres, madres solteras en su mayoría, quienes han sufrido de los constantes desalojos de las inmediaciones de los mercados e incluso del despojo de su mercancía por parte de los inspectores de comercio.
Se trata comerciantes dedicadas a la venta de tortillas y antojitos, tamales, flor de cempasúchil, papel picado, y otros artículos utilizados en los altares y ofrendas de muertos.
Todas ellas se encontraban ubicadas en los mercados Galeana, La Rotonda, Los Sauces y calles del centro como Poeta Jesús Díaz a donde las han ido a perseguir los enviados del alcalde morenista.
Por ello, en los últimos días estas mujeres han buscado otros espacios en donde instalar sus rejas y sus mesas con la mercancía de temporada.
Al ser entrevistadas sobre el puente Xallitic en donde están vendiendo dijeron que constantemente son amenazados por los trabajadores municipales.
“Vienen y nos dicen que nos quitemos porque si no van a llevarse toda nuestra mercancía. Tan sólo a mí ya me lo hicieron, ya tiene como un mes que llegaron con violencia y nos arrebataron todo lo que tenía ese día: cuatro rejas de plátano y unas lonas de carbón”, relató una de las víctimas de los malos tratos de los inspectores.
“Nos dedicamos a la venta de todo lo que sembramos: flor, tepejilote y cosas que compramos de temporada para vender, ahorita estamos vendiendo cosas del día de muerto y luego traemos cosas navideñas”, agregó otra.
Las mujeres dijeron ser originarias de municipios vecinos como Cosautlán, Tlalnelhuayocan y otras localidades como Mazatepec.
“Estamos aquí para que nos dejen vender en nuestros puestos porque fuimos despojadas y ya no nos dejan vender y los que tienen puestos más grandes a esos no les dijeron nada”, agregó otra comerciante.
“Nosotros no tenemos para que repartir nuestra mercancía más que poquito”.
No cabe duda que este alcalde xalapeño es la prueba viviente de que no es lo mismo tener títulos universitarios y la teoría a conocer la realidad y la vida. Las comerciantes son parte de esas personas que buscan ganarse la vida y llevarles el pan a sus familias, son empleos temporales que este gobierno no es capaz de crear.
