Estadísticas fúnebres

Lamentable episodio es el actual en la vida de la nación mexicana cuya narrativa central se fija en el desempeño de dos graves patologías, una se refiere a la salud individual, la otra a la sociedad en su conjunto, aunque finalmente esa dualidad golpea al tejido social. Uno está encarnado por la agresiva pandemia caracterizado por el Covid-19 con la versión Delta, el otro por la delincuencia sin control que asola a la sociedad mexicana. En cuanto a la pandemia sanitaria, México acumuló ayer 246 mil 203 muertes por Covid-19, con 727 nuevas defunciones, cifras que ubican a nuestro país en el cuarto lugar mundial en número de fallecimientos (1-Estados Unidos, 2-Brasil, 3-India), y en el tercero en nuevas muertes (Brasil, primero, Estados Unidos, segundo), un grave síntoma adicional es el elevado número de contagios diarios, 22 mil 711, fue el reporte de ayer. Al margen de la necesaria evaluación sobre el aparente mal manejo de la estrategia anticovid-19, contra esa agresiva enfermedad el antídoto es el confinamiento y el riguroso apego a las medidas de protección establecidas por las autoridades, pero lo más afectivo son las precauciones de cada quien para su autodefensa y la de los demás, no se ve de otra.