MAMÁ CON ESTILO / Zaira Rosas

POR: ZAIRA ROSAS

 

Uno de los aspectos que hay que cuidar al convertirnos en mamás es  el no perder nuestro estilo, y esto empieza ya desde el embarazo, cuando el cuerpo cambia y quizás las prendas que solíamos vestir no nos quedan igual. Cuando tenemos hijos surgen miles de tareas y pendientes, y andamos siempre de prisa, lo que hace que busquemos resolver primero todo lo demás, antes de pensar en arreglarnos Y cuidar de nuestra apariencia. Es común escuchar que, con la maternidad, los hijos se vuelven prioridad, pero eso no significa que dejemos de ser mujeres, al contrario, simplemente debemos tratar de encontrar un equilibrio y ser prácticas.

¡No pierdas tu comodidad!

Tener estilo no van contra de la comodidad. Una vez que los roles en nuestra vida cambian es normal que también evolucione nuestra forma de vestir; la clave está en tomarnos un día para seleccionar las prendas que ya no nos sirven y tener a la mano aquello que sí, a esto súmale un poco de creatividad: combina tenis con faldas o vestidos – deja de lado la idea de que sólo van con ropa deportiva-, y juega con esas prendas que tanto te fascinan, acentuando las con algo llamativo.

¡Sé práctica!

Ahorrar tiempo es indispensable cuando se trata de compaginar todos los pendientes, por ello, la clave está en contar con prendas que puedan mezclarse con todo: ten un buen par de tenis blancos, zapatillas negras que sean cómodas, una T-shirt de impacto que vaya con todo, unos jeans que se ajusten a tu cuerpo, una chamarra tipo biker, un blazer llamativo. Así no perderás tiempo pensando en cómo combinar lo que hay en tu clóset, sólo procura que no todas tus prendas sean básicas y entonces lograrás un mayor impacto.

¡Resalta tu estilo!

Ser mamá no significa olvidarte de ti, al contrario, tómate el tiempo necesario para darte ese momento que te haga sentir especial, de esta manera también le muestras a los demás que lo más importante es cuidar de sí mismos. Si quieres ahorrar tiempo en el maquillaje, utiliza un labial llamativo como punto focal; si tu problema es el peinado, opta por recogidos con accesorios para que tu cabello no se vea desarreglado; invierte en prendas con estampados únicos qué puedas combinar con los básicos que ya mencionamos antes y, sobre todo, ten la certeza de que tu mejor accesorio siempre será una sonrisa.