Gustavo Moreno Ramos / Sergio González Levet

Sin tacto

Gustavo Moreno Ramos

Por Sergio González Levet

 

Mi querida prima Alba Martha Sesma y Rodríguez me informó en sus redes sin querer sobre la muerte repentina y temprana del profesor Gustavo Moreno Ramos, víctima de la Covid-19 y el descuido oficial, como otros 250 mil compatriotas.

En realidad, Gustavo debía haber recibido la vacuna desde hace algún tiempo, y de ese modo el mal que lo llevó a la tumba hubiera pasado como un simple catarro.

De lo demás -el viaje de urgencia de Veracruz a Xalapa que ya no pudo completar el estimado profesor, por ejemplo- me fui enterando en los canales informativos de El Chiltepín, el magnífico medio de comunicación que mantiene a sangre y fuego mi discípula y respetada colega Eleaney Sesma.

Imaginé desde el primer momento la conmoción que estaba causando en Misantla y en Arroyo Hondo el fallecimiento de un personaje tan apreciado por su sencillez y bonhomía.

Como maestro, sus alumnos lo recuerdan como un docente cumplido y estricto, pero con un gran sentido del humor -como es habitual es las personas de esa tierra.

Como presidente municipal, muchos guardan su imagen cuando salía a altas horas del Palacio misanteco, y todavía se daba un rato para tener acuerdos de último momento con los desvelados que lo esperaban en el Parque Morelos para pedirle un apoyo, una ayuda, la solución de un trámite.

Y como paisano, no lo olvidaremos sus amigos, para los que siempre tuvo una sonrisa, un gesto, un saludo lleno de afecto, y una anécdota salpicada de esa picardía tan suya.

Vamos a extrañar al profe Gustavo y más lo harán las urnas el 6 se junio, que se iban a repletar con los votos a favor de su candidatura a diputado local.

Con la muerte de Gustavo Moreno Ramos se va un magnífico misanteco, que será recordado por sus hazañas dentro de la Sección 32 y sus batallas electorales que le ganó a su compadre Juan Nicolás Callejas Arroyo. Esos triunfos gloriosos lo tenían convertido en el rey del voto en la región cachichinera.

Ahora los morenos buscan en Misantla un nuevo candidato, con la certeza de que nunca van a encontrar una persona de lustre, de talento y de buen corazón como lo fue Gustavo Moreno, a quien por cierto distinguía el propio Andrés Manuel López Obrador, y le mostraba respeto y consideración.

Te vamos a extrañar, amigo, y esas tertulias en las que repasábamos con tu gran conocimiento las personas y las condiciones del pueblo, que pronto tendrá una calle, un monumento y un homenaje en tu honor.

Más que merecido.

 

sglevet@gmail.com