POR: JOSÉ MUÑOZ COTA
(In Memoriam)
No todo se ha perdido si te ganó mi soledad impía. Razona este anciano corazón. Si lo aposté, gané tu sombra y ahora las dos deambulan de la mano.
Razona el corazón: si te sembré con sueños, mi cosecha es de sueños.
No todo se ha perdido si le devolviste el remo a mi naufragio. Y con mis albas nuevas navegué hacia la aurora.
Razona el corazón su temor a que el olvido borre que grabamos en una nube nuestros nombres.
Que el olvido no llegue. Que no llegue, que no borre la póstuma línea que buscará tu mano y con paciencia cruzaremos la calle.