El desenlace de la elección de dirigente nacional de MORENA es de pronóstico reservado tras el complicado resultado de las consultas de tres empresas encuestadoras en las que Muñoz Ledo y Mario Delgado quedaron en empate técnico, con cerrada ventaja del primero autocalificándose por ello como el ganador. Pero en el fuerte diferendo entre ambos personajes han mediado serias acusaciones ocasionando heridas difíciles de restañar, además refleja el abrupto desencuentro entre concepciones opuestas conviviendo en un mismo partido luchando por la supremacía de una sobre la otra. De quién resulte nuevo dirigente dependerá la orientación del partido que surgirá cuando uno de los dos personajes tome posesión, si esto es posible. El INE ya anunció que realizará nueva encuesta entre el 16 y el 22 de octubre, Porfirio dice “háganle como quieran, yo ya gané”.