Antaño, cuando un presidente de la república visitaba una entidad federativa levantaba olas de expectación y las especulaciones iban desde el apoyo presidencial al gobernador hasta el anuncio o inauguración de una obra pública de gran calado, y en cercanías de un proceso electoral la atención se centraba en ver a qué actor político invitaba a su gira como adelanto de una posible candidatura priista. Ya no es así, ahora el presidente López Obrador visita asiduamente los estados, como en el caso de Veracruz donde estará este fin de semana, aunque aquí no ha inaugurado ninguna obra pública, aparte del anuncio del corredor transistmico, nada más. Viene a evaluar programas de bienestar, dice, lo cual nos dará oportunidad para conocer cuáles son en Veracruz y de paso saber si también evaluará al gobierno del Estado.