En picada, comercios de Xalapa; ventas no repuntan

Ventas cayeron hasta 60%; damos precios accesibles para poder pagar renta, agua y luz, dicen vendedores

“Ay señor, estamos del cocol, estamos de la fregada con bajas totales”, dijo doña Margarita de Jesús, quien atiende un local de frutas y verduras en la calle Camino Antiguo a Naolinco de la colonia Margarita Maza de Juárez.

Doña “Mago” ha sido testigo de cómo su negocio ha venido a menos desde que comenzó la ya histórica pandemia. Mientras atendía a los pocos clientes que llegan a comprar a su local, doña “Mago” reconoce que las ventas cayeron enormemente. “Como en un 70% de la gente que venía, pero qué le vamos a hacer, quién nos va a mantener, tenemos que trabajar”, manifestó.

Para atraer a más clientes, utilizaron el recurso de bajar los precios a los productos. “Sí, damos precios accecibles para sacar algo, ya que hay que pagar la renta del local, agua, luz y empleados, además los impuestos, porque el Ayuntamiento no se fija si vendes o no vendes, lo que quiere es dinero”, dijo.

En tanto, don Óscar Zamudio, quien tiene un puesto de verduras en la avenida del Café de la colonia Arboledas del Sumidero, también ha sufrido las secuelas que está dejando la emergencia sanitaria. “Las ventas han bajado bastante y ha sido bien difícil mantenerse”, señaló. En su caso se han reducido más de un 50%.

Por la situación que se vive decidió vender las frutas y verduras más baratas. “Incluso hay que dar precios para ver si así podemos atraer un poco de clientela, pero no encontramos cómo hacerle para que regresen a hacer sus compras como antes”, mencionó.

En la calle Camino al Tronconal de la colonia Arboledas del Tronconal se ubica la miscelánea De Karen, donde la chica que la atiende reconoció que han venido a menos. “Siento que antes había más movimiento porque venían los niños de las escuelas cercanas”.

Karen Hernández comentó que varía la presencia de clientes. “Porque hay días que se vende, hay días que están muy tranquilos y hay días que no viene nadie”, precisó.

En la avenida Pípila don Óscar Sánchez es otro de los que sufren por las pocas ventas. “Está bien pelado, antes llegaban 50 o 60 clientes hoy sólo 25 o 30”.

Dijo que se mantiene porque lo poco que vaya cayendo ya es ganancia, la que servirá para los gastos que generan renta del local y otros servicios. “Pues lo mantengo, los gastos los pago, pero vendo a la mitad, ese es el pequeño detalle”, comentó.

En una tienda del centro de la ciudad el joven Christopher Castro padece del mismo mal. “Son días difíciles, pero nos mantenemos con dificultad porque también nos vemos reducidos en la compra de mercancía”.

Señaló que deben realizar un mejor presupuesto para no rebasar el monto de dinero con el que disponen.

“De un 50 a 60% bajaron las ventas, pues antes en una hora despachaba a 50 o 60 personas y ahora sólo a cinco”, concluyó.

En la avenida del Café, Ángel Carballo ha visto cómo se reduce la llegada de clientes al puesto donde ofrece aguacates, cocos y piñas. “Antes había más gente, hoy como que ya compran menos”, dijo el chico, quien tiene cerca de cuatro años de laborar en ese lugar.