De Ángeles Mastretta: “Pasar por twiter diez minutos, requiere cinco horas de silencio para recuperarse”.
EL CHUMEL-AMLO (PARTE DOS)
El estira y afloja entre el presidente y el youtuber, comunicador exitoso, Chumel Torres, tuvo sus consecuencias. Como en los tiempos del priísmo arrollador, voló la primera cabeza, decapitaron a la titular del Conapred y no solo eso, la mismísima Olga Cordero (que quita los pecados del mundo), le pidió la renuncia por acuerdo presidencial. Algunos aseguran que ese organismo desaparece, otros opinan que cómo se les ocurrió invitar al buen Chumel, cuando había llamado ‘Chocoflan’ al niño del matrimonio, y eso enardeció a la señora, cuando entró con aquel hastagh: #Con los niños no. Y el mas duro de todos los tuiters, para tomar una idea de adónde llegó este desencuentro, fue el de la exitosa comunicadora, Denise Dresser: “Vergonzoso que el @lopezobrador_exija la renuncia de una buena funcionaria por la presión de su esposa. Vergonzoso que Olga Cordero se preste a hacerle el trabajo sucio. Vergonzoso que la 4T desmantele instituciones creadas/exigidas por la izquierda. Vergonzosa complicidad”. Después de esta renuncia anunciada, el presidente ahora sugerirá a una mujer indígena al frente, si no es que la desaparece.
EL JUEZ EN EL PAIS
Lo soltó el día de ayer el diario español El País. El juez federal, Uriel Villegas Ortiz, quien fue asesinado en su domicilio, junto a su señora esposa, traía seguridad (camioneta blindada y personal de seguridad), pero él mismo había pedido se la retiraran. Lo que no dijeron en México y sí lo escribió ese diario señero, que algunas o muchas veces esos mismos jueces piden se les retire porque ellos mismos tienen que pagar de su sueldo, gasolinas y viáticos (hotel y comidas) de quienes los cuidan. Y un juez honesto no aguanta esa carga económica. Terrible.
QUE SE LAVEN LA CARA
El presidente AMLO carga en su haber, aquel que llama el fraude en la elección de 2006, cuando Felipe Calderón le ganó la presidencia. Ahora mismo, en una mañanera desde el cuartel militar, conminó a la maestra Elba Esther Gordillo a que ‘suelte la sopa’, y hable y no guarde silencio para siempre. Qué diga lo que ella sabe, y le enumeró algunas pláticas entre los políticos de aquel entonces, incluido Eugenio (Geño) Hernández, gobernador de Tamaulipas caído en desgracia, que ahora está en la cárcel por asuntos de lavado de dinero por el narcotráfico, y AMLO dijo que a la cárcel lo había metido un gobernador del PAN. Esa historia del 2006 trae al presidente en la mente. No se quita de encima que desde aquel año pudo haber sido presidente del país, no le da consuelo que ganó con 30 millones de votos y arrasó la contienda presidencial, quiere que los actores de aquel tiempo, como la Maestra, hablen y hablen y no dejen de hablar, como los peces en el rio. Cosas veremos mío Cid, dijera aquel personaje.
