* URGE SANEAR LA FGE

AL PIE DE LA LETRA

Raymundo Jiménez

* URGE SANEAR LA FGE

Este jueves Verónica Hernández Giadáns cumplirá una semana de haber sido designada por la LXV Legislatura local como titular de la Fiscalía General del Estado (FGE) para el periodo 2020-2029. Sin embargo, tal parece que la abogada oriunda de Santiago Tuxtla recibió del yunista Jorge Winckler una institución funcionando impecablemente, porque ni en los nueve meses que estuvo como encargada provisional ni ahora que ha sido ratificada ha tomado acciones contundentes para abatir el descomunal rezago de miles de indagatorias y combatir la arraigada corrupción de policías y agentes ministeriales.

Anteayer, por ejemplo, circuló en redes sociales una carta dirigida a ella, al gobernador Cuitláhuac García Jiménez; al secretario de Gobierno, Eric Cisneros Burgos, y al director general de la Policía Ministerial, Samuel López Leza, en la que agentes policíacos de la Delegación Zona Centro Xalapa, “apoyados por compañeros elementos en el resto del estado y principalmente en la zona sur”, denuncian “los abusos de los que somos objetos de parte del segundo comandante en la zona de Xalapa, Emilio Sánchez Hernández…”

Los denunciantes exponen que “ya que nadie nos escucha, nos vemos en la necesidad de hacerlo en esta forma, (…) estamos cansados de los abusos del segundo comandante, quien desde su llegada nos ha impuesto una cuota mensual a jefes de grupos, con la amenaza además de cambiarnos de lugar al que no esté de acuerdo, así mismo, los días de descanso también los condiciona al grado de cobrarnos con dinero en efectivo, pero lo grave empieza cuando nos obliga a pedirles dinero a los agraviados con el argumento de agilizar las investigaciones en las carpetas, dinero que dice tiene que llevar a la Dirección con el propio titular Samuel López Leza”, de quien, aseguran, “no creemos que necesite de limosnas para sobrevivir…”

En cambio, a Sánchez Hernández lo tachan de ser un “desleal policía, sin ética profesional para trabajar”, que “también ha dejado impune muchos de los delitos que se investigan cuando es muy de su gusto cobrar cuota a presuntos señalados en investigaciones”. Y refieren que “se sabe, desde el sur del estado, de donde por cierto es originario, (que) no es muy querido debido a su ambición por el dinero”, señalando que “más grave aún” es que anteponga a sus jefes superiores, para los que supuestamente dice “va dirigido lo recaudado…”

El comandante es acusado además “de acosar sexualmente al personal femenino a su cargo, a quienes también amenaza si por algún motivo dicen algo…”

Este martes, durante la sesión de la Mesa de Coordinación para la Construcción de la Paz, el gobernador Cuitláhuac García convocó al Comité Interinstitucional de Consolidación del nuevo Sistema de Justicia Penal para revisar la actuación de los jueces que liberen a priori a delincuentes que ameriten cárcel preventiva, como acaba de suceder en el sur del estado con un criminal.

Sin embargo, el fallo de un juez depende fundamentalmente también del buen trabajo de la Fiscalía.

ASESINAN A PRIMO DEL ‘PÁMPANO’

 

Por cierto, la noche de este miércoles fue asesinado en su domicilio, en el fraccionamiento Floresta, del puerto de Veracruz, el exfiscal porteño Ángel Fuentes Olivares, (a) El Pato, primo de Manuel Fernández Olivares, secretario técnico de la Fiscalía General del Estado.

 

Seguramente este crimen se va a resolver más pronto de lo que canta un gallo.

 

SUSANA TORRES, DE LUTO

 

Este miércoles falleció el maestro Leonel Torres Fuentes, hombre recto, quien siempre privilegió la buena conducta no sólo como profesor sino como persona honesta, formador de una familia ejemplar junto con su ahora viuda, doña Consuelo Hernández, ambos vecinos de la ciudad de San Andrés Tuxtla, donde se están llevando los funerales de manera íntima, como lo imponen las circunstancias actuales.

 

Don Leonel era padre de la excontralora general del estado, Susana Torres Hernández, a quien le expresamos al igual que a todos sus hermanos y familiares nuestras más sinceras condolencias por esta lamentable e irreparable pérdida.