FASE 3: COVID 19

 

RAFAEL MARÍN MARÍN

En memoria de mis muertos y contagiados, por su eterno descanso y recuperación

Como en todos los países, México llegó a la fase 3 de la contingencia lo que implica, el mayor número de acciones posibles para mantener el distanciamiento social, confinamiento ciudadano o sana distancia llamada en México, en aras de evitar miles de contagios y cientos de muertes por Covid;19, extraño y microscópico enemigo no aparecido hasta hoy en los últimos 100 años, con brutales daños en todos los sentidos sobre todo pérdida de vidas humanas, pero además, que desnudó los sistemas internacionales de salud que no estaban ni están preparados para este tipo de pandemias, incluido México.

Datos recabados por medios nacionales como El Universal que son tomados en parte de la Universidad Johns Hopkins, describen los números rojos en México a partir del 27 de febrero que a la fecha de publicación nos arroja los siguientes números. 19 mil 224 contagios, mil 859 muertos, lo que representa 300 casos positivos diarios, 12 por hora, dos cada 10 minutos; en caso de fallecidos 29 por día, 1 cada hora. Datos que son alentadores aun a pesar de la desgracia comparado con los de China y Estados Unidos, pero sobre todo con el dato inicial que ya publicamos “un contagio cada segundo y un muerto cada media hora”.

Bajo ese escenario los estados más contagiados son Baja California, Sinaloa, Tamaulipas, Zona metropolitana CDMX, Tabasco, Quintana Roo, obvio con el mayor número de muertes, que ha llegado a todos incluyendo los valientes y heroínos médicos, enfermeras, trabajadores de la salud. De seguir el número de contagios y fallecidos en el mejor de los optimismos, terminaría la fase 3 a fin de mayo con las siguientes proyecciones, 30 mil contagios y 3 mil muertos, sin considerar los subregistros que como lo dijo en su momento López Gatell, no están en las estadísticas y que el no distanciamiento ciudadano puede contagiar a 28 por cada uno, lo que en miles sería doblemente brutal. Y no necesitamos conocer un fallecido para dudar si el enemigo existe, porque existe.

Es decir, las matemáticas han fallado ante COVID19 y nadie a ciencia cierta sabe que pasara a mediados de mayo cuando se espera la explosión mayor de casos en los dos sentidos. Por ello se hace indispensable que el gobierno de la república anuncie con tiempo porque lo tiene que los mexicanos debemos tomar mayor precaución, para que del 7 al 15 de mayo nadie prácticamente esté en la calle, con provisiones suficientes para esos días, que como de película fuera serían días bajo techo o bajo tierra con provisiones suficientes para evitar el mortal bombardeo de Covid 19. Y estamos a tiempo, porque estamos en guerra.

Este hijueputa del virus nos ha quitado el sueño, metido miedo y el diario vivir, derrumbado trabajos y economías, además de las trágicas bajas, pero no podemos darnos por vencidos. Nos mostró su punto débil que es el confinamiento social, lavado frecuente de manos, reglas de limpieza olvidadas y replantear nuestra vida y alimentación, porque de no aprenderlo, podemos caer muchos más, sobre todos padres que dejaran sin duda a hijos en la orfandad.

Por ello el gobierno de México y el mundo deben mirar hacia políticas publicas colegiadas, que de cara al ciudadano demuestren que son capaces de afrontar de mejor manera la contingencia, dejando de ser egoístas en sus intentos particulares de atención y escuchar las voces de todos contra este bicho y los que vengan. Vimos que México por teleconferencia hablo con todos los países de ONU, pero ya no vimos más y la guerra sigue.

Guerra que deja heridos, soldados médicos sin pertrechos, pero valientes al fin, también deja secuelas de guerra como odios, estrés, miedo, crisis, lo que hace impostergable que el gobierno de México instaure políticas de atención para combatir todo lo anterior, sobre todo en niños que llevan meses en el confinamiento.

Pero además me parece que la política económica de atención a los que no pueden trabajar, aunque muchos lo hacen por lo mismo de no tener apoyos del gobierno, es una equivocada aunque plausible. Los negocios como bares, empresas etc, no entienden por qué se les obligó a cerrar cuando a otros restaurantes de cadenas nacionales y tiendas de ropa y prestamos de dinero para regresarlos en paguitos no cerraron y no cerrarán, lo que habla de injustas medidas que se han violado o se violaran ante el doble discurso de quédate en casa tu…pero el otro no.

Por lo pronto entramos a la fase 3 y los médicos y enfermeras se quejan del poco apoyo y equipo para atender la pandemia, que también ha sido brutal para ellos las largas jornadas dedicadas, con el único compromiso de cumplir con su vocación, vaya héroes.

De algo estoy seguro, acabada la pandemia que parece nadie sabe cuándo será, vendrán las facturas a cobrar de todos y para todos, para saber quién es responsable de cada una de sus acciones u omisiones, que esperemos no sean sobre más muertos y contagiados, es decir, miles y miles. Sigamos al final las indicaciones sanitarias de actores desgastados, pero al final ciertas. Si alguien debe salir a trabajar o actividad indispensable seguramente lo hará, pero con responsabilidad. Vemos familias enteras con niños en las calles lo que no tiene un ápice de conciencia tal acción.

Por ultimo seamos solidarios con todos y apoyarnos en una buena solución y alimento al alma en tiempos de confinamiento.

 

El autor es Presidente del Colegio de Profesionales y Técnicos del Estado de Veracruz, COLPROTVER y, Delegado de la Institución Nacional para la Celebración del Día del Abogado. INCDA.