SE ACABA EL MES Y LLEGA EL AGUACATE

*Te van a devorar, dicen del aguacate mexicano en el Súper Bowl. Camelot.

 

SE ACABA EL MES Y LLEGA EL AGUACATE

 

Es media semana y el mes se va muy rápido, como la vida. La vida, la caprichosa vida, diría Agustín Lara. Es media semana y a veces dan ganas de escribir de cosas mundanas, de cuando se da uno una vuelta por el mundo para evitarnos de las jaladas de rifas de aviones y los 100 muertos diarios que caen en nuestro país, como cayó lastimosamente el pelotero Narciso Elvira y su hijo, acribillados en Veracruz, donde los demonios siguen sueltos y los cañonazos no dejan de sonar, y Míster Trump con su Muro, que ya pagan los mexicanos al grito de guerra (Hace bien el presidente AMLO en no subirse a ese ring, Trump lo utiliza como lema de campaña). Viene el Súper Bowl del domingo y los exportadores de aguacate están felices. El primer touchdown del Súper Bowl lo mete el aguacate mexicano, el guacamole fascina a los gringos. Una vez de hace unos tres años, por esas cosas de viajar por dónde se pueda, andaba en un Día de Acción de Gracias por Dallas, Texas, caía el famoso Thansksgiving Day, que hace que los americanos viajen a sus hogares y celebran como pocos países en el mundo, su día de guardar y de shopping. Es también el día de la súper venta, el Black Friday. Pues estaba en Dallas y me tocó ir a ver el juego de los Vaqueros de Dallas, con todo y sus conejitas afamadas en ese estadio, el AT&T, que les costó un poco más de mil cien millones de dólares, bello desde donde se le vea. Lo que llamó mi atención ese día de aquel juego, es que desde unas dos horas antes, o tres, la gente que va al juego llega en sus camionetas pick up, bajan su asadero o parrilla, la prenden y comienzan a asar carnes que comen entre ellos y al lado, el insuperable guacamole con sus chelas Budweiser, llevan también sus mesas portátiles y sus sillas. Luego, faltando unos 15 minutos se meten al juego, ya bien comidos y bien guacamoleados. Guacachips, le llaman a su plato que nosotros conocemos como totopos. O Nachos.

 

EL AGUACATE QUE LES SUBLIMA

 

La asociación encargada de realizar los envíos a Estados Unidos contabilizó un total de 120 mil toneladas exportadas este año, un 20% más que la cantidad enviada el año pasado. “El crecimiento sostenido del envío a cada Súper Bowl oscila entre un 15% a 20%. El envío lo llevamos haciendo desde 2014, y desde hace cinco años a la fecha llevamos un crecimiento del 100%”, comenta Gabriel Villaseñor, presidente de la Asociación de Productores y Empacadores Exportadores de Aguacate de México (APEAM). 1,335 camiones refrigerados de aguacate salen semanalmente a Estados Unidos. Cada 6 minutos sale un camión de Michoacán, 18 toneladas de aguacate van en cada camión. ¿Por qué les gusta tanto el guacamole? Desde 1997 a los gringos les dio por el aguacate y desde ese entonces lo comen a diario, pero en el Súper Bowl revientan con sus tortillitas mexicanas o sus nachos. En México un kilo de aguacate, de mi tío (aunque él no sabe que es mi tío), el aguacate Hass vale en los supers 30 pesos y en Estados Unidos, ahora mismo está a 2 dólares, cerca de unos 40 pesos. Y en estos días de consumo gigantesco se va a 3.60 dólares, unos 70 pesos el kilo. Oscila según la temporada y consumo, aquí en fin de año anduvo el kilo a 70 pesos. Según el Wall Street Journal, el Súper Domingo se consumen más de millón y medio de kilos de aguacate. Dice el diario que entre 2013 y 2017, 27 mil y pico de personas gringas se hirieron al intentar sacar el hueso del aguacate con cuchillos, cuando lo deben hacer con una cuchara, cucharearlo, pues. Bueno, voy a Kansas a todo esto, en la final contra los 49 de San Francisco. Hagan sus apuestas y cierren las puertas. “Avocados from México”, se llama al anuncio que se podrá ver durante el juego del Súper Bowl, un anuncio de 30 segundos cuesta unos 5 millones de dólares, que los aguacateros mexicanos lanzan en ese juego que tiene más de mil millones de espectadores en el mundo, 120 millones de ellos solo en Estados Unidos. Medio pinchón el comercial aguacatero, nada como los grandes anuncios de ese partido.

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