Entre la crítica y la apología

Entre las más destacadas características de los medios de comunicación y sus operadores está la de servir a la sociedad informándole con veracidad de cuanto en ella ocurre, hacer las veces de correa de transmisión entre la sociedad y lo que el gobierno hace o deja de hacer, cuánto de lo que dice cumple, y si sus acciones son congruentes con su discurso. Para poder realizarlo lo más genuinamente posible la primera premisa es no caer en contubernio con las autoridades, ser crítico de sus acciones es mejor al silencio cómplice. Sociedadtrespuntocero.com ha procurado mantenerse en esa postura, lejos de la apología respecto del poder, siempre presto a la crítica objetiva; esto último es preferible al silencio cómplice. Si la gestión pública es acreedora al reconocimiento ciudadano, los medios deben expresarlo una vez concluido el mandato, de otra manera es “reconocimiento” confundible con la apología interesada, pues es de suponer que se hizo lo que por ley debe hacerse. Tal es el criterio de Camaleón, y lo aplica sin filias ni fobias “ideológicas” o políticas”. Así lo seguirá haciendo.