Haber dado dinero a los jóvenes que ni estudian ni trabajan, fue una medida que benefició a una bola de huevones a lo largo y ancho del país.
Desde que se confirmó la entrega a diestra y siniestra de dinero en efectivo a los que ahora se conocen como “ninis” muchas voces se alzaron para advertir que el programa se terminaría convirtiendo en una Escuela para Flojos.
Y así ha sido porque el recurso se entrega parejo, sin distingo, lo mismo va para estudiantes flojos que no lo necesitan ni lo merecen que para los estudiantes de escasos recursos y con buenos promedios deben ser apoyados, sin duda.
Muchos de esos ninis también fueron incorporados al programa Jóvenes Construyendo el Futuro en el que el gobierno les da su lanita para que acudan a algún centro de trabajo a capacitarse, pero esto no está ocurriendo, los beneficiados quieren el dinero pero no quieren trabajar, son unos huevones buenos para nada.
A casi un año de gobierno todo apunta a que la medida no fue bien planeada y requiere ser revisada y modificada para el próximo año.
