Rosario, la punta de la 4T
Salvador Muñoz
Del “No te preocupes, Rosario” se pudiera vaticinar el “Preocúpate, Enrique”… dije: “Se pudiera vaticinar”, pero la historia reciente en torno al expresidente Peña Nieto, nos dice otra cosa… por ejemplo: Javier Duarte de Ochoa.
¿Qué pasa con el ex gobernador Javier Duarte de Ochoa?
Muy independiente de todos los delitos que le imputen en la Fiscalía General de la República así como los que se le acumulen en la FGE de Veracruz. en torno al cordobés hay una sospecha de las que todos hablan, pero que no se ve, percibe, o sepa dentro de los expedientes o procesos en contra de él: el haber utilizado recursos públicos para la campaña del entonces candidato a la presidencia de la República, Enrique Peña Nieto…
Por supuesto, sólo en la remota idea de que así hubiera sido, es claro que no hubo una entrega directa entre Javier y Enrique, sino que es posible que hubiera otros encargados tanto de los dineros entregados como recibidos, por decir nombres al azar, sin que esto sea una acusación: Videgaray, del lado del Altiplano; y el tesorero o secretario de Sefiplan del gobierno duartista… tuvo varios…
El asunto de todo este entramado del párrafo anterior nos lleva a hacernos una pregunta: ¿Quién paga los platos rotos de las acusaciones al gobierno duartista? ¡Exacto! nada más el ex gobernador… único sentenciado.
II
La historia política parece proteger siempre a los poderosos y si es necesario, eliminar a los prescindibles… como lo narra la siguiente leyenda política:
Un alcalde, por decir un municipio, Orizaba, pactó con el candidato a la Gubernatura de Veracruz, quien le prometió la luna y las estrellas en cuanto llegara a la Plenitud del Pinche Poder… el edil aceptó hasta las condiciones en que se iba a entregar el apoyo: ¡en efectivo! Se cuenta que el dinero entregado era similar a la cantidad (por el espacio y dimensiones) que se le encontró a Zhenli Ye Gon, el de “Copelas o Cuellos”.
El alcalde de Orizaba ya se veía como secretario de Gobierno, pero no contó que otro alcalde, por decir un municipio cualquiera, de Xalapa, habría de entregar en las mismas condiciones que su homólogo, más “apoyo” al candidato a la Gubernatura.
Al tiempo, el ya ex alcalde de Orizaba se fue a “estudiar” a España un tiempo, mientras se le pasaba el coraje dejando atrás un ayuntamiento en quiebra y su nombre grabado en el recuerdo de los orizabeños como el munícipe más corrupto que haya tenido esta ciudad. Por otro lado, el alcalde de Xalapa pidió licencia y fue nombrado secretario de Gobierno de un gobierno que estuvo en la plenitud del pinche poder…
Sí, no hubo castigo al de Orizaba, pero sí descrédito por retar al Gobernador… los estilos de la política de antes…
III
Hoy, Rosario Robles, para los avezados en la política, no deja de ser sólo la punta de la madeja que a pesar de tantos nudos, para nadie pasa desapercibido quiénes están enredados en ésta, que van desde un José Meade, Videgaray, hay quienes incluyen a Osorio Chong, aunque si de cabezas se trata, el personaje principal tendría que ser Enrique Peña Nieto.
Carlos Salinas de Gortari tuvo en la Quina, un manotazo que sacudió a los actores políticos en aras de que se alinearan, además de darle de cierto modo, acreditación a su gobierno… Ernesto Zedillo tuvo en Raúl Salinas de Gortari el remanso a la crisis económica y política que sacudía al País… Enrique Peña Nieto tuvo en Elba Esther Gordillo el golpe político que hubiera sido perfecto, de no ser por tanto descrédito que su gobierno iba arrastrando…
El Gobierno de la Cuarta Transformación está a nada de dar un golpe espectacular si continúa investigando y recaba las pruebas suficientes para desenmarañar esta madeja política que tiene como punta, a Rosario Robles… pero también está a todo de echar abajo la expectativa que generó en millones de mexicanos que creyeron en un cambio… si Rosario Robles es la única que cae, quedará más que claro que cualquier cosa que diga este Gobierno, será tan similar a la que hubiera dicho cualquier otro que hubiera arribado al poder… a ver qué tal sale López Obrador de su propia prueba…
