La suerte está echada

CAMALEÓN

La suerte está echada

Durante el presente proceso electoral en Veracruz la atención está centrada en los candidatos al gobierno de la entidad, principalmente de los tres competitivos porque la candidata de Nueva Alianza interpreta un rol implícito en la estrategia de alguno de los otros partidos en competencia. Un dato para destacarlo es el relativo a la insistencia de reducir a solo dos esta contienda, dejando al margen al candidato más conocido por la ciudadanía veracruzana, José Yunes Zorrilla, el de mayor experiencia y más prolongada trayectoria política ¿por qué? ¿Es verdad o están en lo cierto las encuestas que lo ubican como el menos conocido?

Por sentido común es completamente inaceptable la aseveración azas difundida sobre una competencia cerrada entre solo Miguel Ángel Yunes Márquez y Cuitláhuac García; por mucho que se reconozcan las difíciles circunstancias por las cuales atraviesa el Partido Revolucionario Institucional y que esto milita en contra de su campaña, no es del todo un argumento válido para descalificar a un candidato cuyo perfil está muy lejos de una semejanza con Fidel Herrera o Javier Duarte.

Además, quienes han tenido oportunidad de observar los diferentes debates organizados por el Órgano electoral y de sectores de la sociedad civil han podido advertir quién de ellos contempla con mayor visión la problemática veracruzana, y dentro del subjetivismo colectivo cada ciudadano habrá llegado a sus conclusiones respecto de los tres por igual inducidas por reflexión propia. Por elemental deducción, por razones de trayectoria y haber arrancado antes en el quehacer político no es posible admitir eso de “menos conocido”.

Yunes Zorrilla conjuga 22 años en el escenario político veracruzano, Yunes Márquez 14 años, Cuitláhuac tres años en el escenario estatal aunque con militancia perredista ya añeja.

Debemos enfatizar que, simpatías aparte, no es este un análisis para expresar preferencias, sino para fundar la prueba de que las encuestas (al menos las difundidas en medios de comunicación presentadas) no revelan una realidad objetiva, pues se adivinan sesgadas por el interés político, lo cual para nada es criticable pues en razón política el fin justifica los medios, y solo la madurez ciudadana sirve de antídoto contra marrullerías políticas fincadas en estrategias de campaña.

La campaña para gobernador se acompaña de la tarea subrepticia de operadores partidistas, de quienes son candidatos al senado y al Congreso federal y el local, ellos son la extensión de cada campaña, allí reside en mucho la capacidad y eficiencia de la operación en cada frente partidista. Por supuesto, la campaña presidencial hace su parte, nada despreciable por cierto en el caso de Cuitláhuac García a quien el empuje del lopezobradorismo respalda y en esa ola está cifrada su candidatura.

En los casos de Pepe Yunes y Miguel Ángel Yunes Márquez la campaña de sus candidatos a la presidencia poco incide en las propias pues ni Meade ni Anaya se han colocado en la opinión pública veracruzana, aquí la atención se centra en el futuro más inmediato de la entidad ¿quién será el próximo gobernador.

No es dable eludir las circunstancias que acompañan a cada candidato al gobierno estatal: Cuitláhuac arropado por el Peje, Miguel Ángel apoyado en la estructura creada para favorecerlo desde el ámbito de gobierno, y Pepe Yunes luchando contra la corriente alentada por quienes lo asumen rezagado y lo han dejado libre en su tránsito geopolítico por Veracruz.

Pero no olvidemos el otro elemento: la ciudadanía veracruzana. ¿Ha madurado el electorado a tal grado de discernir que con su voto libremente emitido puede orientar el futuro inmediato de la entidad? Obviamente, como en todos lados del planeta, un gran sector de la población, el menos enterado, el ocupado en la procuración del pírrico sustento diario, es el gran cardumen electoral, allí la pesca es abundante quien lo haya procurado lleva ventaja. La clase media está seccionada, unos por formar parte del voto duro, otros por ser más participativos en procesos polício-electorales y algunos más por formar parte de las cúpulas sociales-económicas y políticas, son votos definidos, aunque en estos “definidos” pulula el “voto secreto”, ese muy susceptible de variar de rumbo ya en la casilla electoral.

A pocos días de la jornada electoral el pueblo de México definirá su futuro político, cualquiera que este sea sin duda marcará un hito en la Historia de México. El impacto de cuanto suceda en la elección federal repercutirá en Veracruz cual debe ser como parte integrante del Pacto Federal. Que sea lo mejor para México y Veracruz.

alfredobielmav@hotmail.com

16-junio-2018.