Miedo en Coatza y Veracruz por alza en delitos: INEGI

? La Contraparte | Óscar Pedro Reyes Castelán
? Miércoles 19 de julio de 2017
? Sólo dos ciudades del estado –Coatzacoalcos y Veracruz– se encuentran incluidas entre 54 puntos del país para el levantamiento de la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana que trimestralmente realiza el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) para medir percepción, conocimiento y experiencias de la población en materia de seguridad. En ambos puertos, la muestra al mes de junio pasado indica que hay una mayor percepción de inseguridad en los ciudadanos: Coatzacoalcos en un 91.2% de los entrevistados y en Veracruz coincide 84% de los encuestados, cifras que están por arriba de la media nacional del 74.9%, segundo nivel más alto en el país desde septiembre de 2013 cuando comenzó a realizarse dicha medición. Lo inquietante es que sólo se evalúan delitos del fuero común, no de alto impacto como homicidios dolosos o secuestros, que si fuesen incluidos, nuestra entidad estaría catalogada entre las de mayor peligrosidad. En la encuesta del INEGI las personas únicamente opinan sobre delitos de robo y asaltos que ocurren en cajeros automáticos, transporte, bancos y calles, valorándose adicionalmente vandalismo y pandillerismo. Hay desde luego lugares que están peor que Veracruz, Ecatepec en el estado de México, por ejemplo, con un 93.6% de personas con miedo ante el incremento delictivo, pero también existen ciudades con sobresaliente calificación en seguridad como son Puerto Vallarta, curiosamente en el violento estado de Jalisco con únicamente 29.7% de temor a la delincuencia, y Mérida con 33.1%. ¿Cómo le hacen las autoridades en esos sitios para tener ese buen clima de seguridad? Habrá que sugerir a quienes no encuentran la cuadratura al círculo en Veracruz que recurran a la asesoría de sus pares de Jalisco y, sobre todo de Yucatán, de tan valiosísima información. Los veracruzanos ya merecen vivir con la tranquilidad que se ofreció dar en los primeros seis meses del actual gobierno, compromiso que recuerda aquella puntada de Vicente Fox de que arreglaría el conflicto de la guerrilla en Chiapas en sólo 15 minutos. +++¿Hasta dónde alcanzará la mano de la justicia para castigar los delitos cometidos por Javier Duarte y sus cómplices y, lo más importante, recuperar todo lo robado? No sólo fueron “él y su banda” de prestanombres y colaboradores cercanos, como se acusa; más allá, Duarte actuó bajo una muy amplia red que incluye a quienes lo encubrieron desde las altas esferas del poder a sabiendas de que cometía el saqueo, y a los que recibían parte del botín de su propia filiación y a los que hicieron tratos y entraron en el ajo, dirigentes o candidatos de MORENA, del PAN o el PRD, como ya se ha ventilado públicamente. Habría muchos involucrados. El ex gobernador –como ya lo demostró en una de las audiencias ante un Tribunal de Guatemala donde dijo que cada funcionario de su gabinete era y es responsable de sus actos– va a deslindarse de muchos y a señalar a quien convenga para defenderse de las acusaciones que le han formulado las autoridades penales, de ahí que haya expectación por lo que ocurrirá en la audiencia de vinculación a proceso del sábado próximo. A su llegada el lunes, en la audiencia inicial, Duarte y sus abogados pusieron en evidencia a los fiscales de la PGR que cayeron en dudas, fallas y contradicciones sin poder responder preguntas elementales de pruebas del delito de lavado de dinero que le imputan por más de 438 millones de pesos, provenientes de recursos públicos, sobre lo cual solo pudieron acreditar fehacientemente 38.5 millones de pesos desviados de la Secretaría de Educación de Veracruz. “Los números no cuadran”, concluyó el juez de control adscrito al Palacio de Justicia Federal en el Reclusorio Norte, Gerardo Moreno García. “Está claro que el caso se está desmoronando”, hábilmente señaló el abogado defensor de Duarte, Marco del Toro. Sin embargo, aún falta mucho por recorrer y la PGR está obligada a presentar pruebas contundentes para fincarle responsabilidad y la defensa a plantear alegatos de descargo. Hay mucho en juego, nada menos para el gobierno federal recuperar parte de credibilidad castigando la corrupción y, así, estar en posibilidad de mantener el poder para su partido, cuestión nada fácil de lograr. +++En el colmo de la incompetencia de la SSP, la noche del lunes dos ladrones en motocicleta y pistola en mano asaltaron ocho tiendas OXXO en solo 40 minutos en Medellín. Se llevaron 16 mil pesos y afortunadamente no hubo heridos. Desde luego, el presidente de la CANACO, Jesús Muñoz de Cote Sampieri, puso el grito en el cielo, y seguramente que de ahí no pasará. La circunstancia recomienda que lo mejor es rezar.